Cuando di a luz a mi hija, una de las primeras cosas que
mi marido me dijo después respecto al parto, fue que le había
impresionado lo "sorprendentemente concentrada" que estaba. "Como metida
totalmente en tu mundo".
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Se puede observar en las
últimas fases del parto fisiológico, un cambio a un estado alterado de
conciencia en la mujer. O lo que es lo mismo, una manera diferente de
percibir y estar en la realidad, en el que según las vivencias que
relatan muchas mujeres, se da por ejemplo, una alteración de la noción
del tiempo , una incapacidad para ciertas actividades como mantener una
conversación normal y algunas otras funciones que estarían regidas por
el neocortex (el nuevo cerebro, el que está mucho más desarrollado en
nuestra especie).
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Tal y como explica
maravillosamente Michel Odent, cualquier inhibición, no sólo durante el
parto, sino en cualquier evento de la vida sexual, procederá de esa
parte del cerebro que el ser humano termina de desarrollar en su edad
adulta. Y es tal su desarrollo, que el ser humano es el único mamífero
en el que el neocortex tiene tanto poder, como para poder inhibir o
poner en riesgo otros procesos indispensables para la supervivencia.
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La
mujer entrará en este "planeta parto" cuando desconecta de todo, del
mundo a su alrededor, y está como "hacia adentro", concentrada en sí
misma... (como dice mi marido que me veía). Ahí, en ese punto, con el
neocortex apagado, se olvida todo lo aprendido, lo cultural, lo racional
y la mujer se siente libre para adoptar las posturas que necesite, para
gritar, abrir esfínteres, sale lo más puramente instintivo.
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Y ¿Cómo se consigue ese apagado del neocortex?...
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En el Planeta Parto 🪐
La luz está muy baja
Hay un ambiente íntimo
Hace calor
No hay observadores haciendo pensar mucho, con preguntas muy racionales y lógicas.
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En
el Planeta Parto la mujer se empodera, conecta con su sabiduría de
mujer mamífera, está segura y confía... Confía plenamente en ella y en
su bebé 💜💚💙❤️